La controversia entre Casa Presidencial y la Universidad de Costa Rica (UCR) sigue escalando tras el trato que recibió un grupo de periodistas por parte del presidente Rodrigo Chaves. Este jueves, la directora de las emisoras de la UCR, Andrea Solano, manifestó su descontento en un comunicado, donde acusó al mandatario de irrespetar la libertad de prensa al dirigirse de manera inapropiada a dos periodistas de dicha universidad.
Solano afirmó que la actitud de Chaves fue una clara violación a la libertad de prensa, lo que generó indignación en los círculos académicos y periodísticos. La directora destacó la importancia de garantizar un entorno de respeto y libertad para el ejercicio del periodismo en el país.
Horas más tarde, Casa Presidencial respondió a las críticas a través de un comunicado, negando las acusaciones emitidas por la UCR. En dicho documento, el gobierno rechazó las afirmaciones de Solano y sostuvo que la universidad estaba difamando al director de Información y Comunicación de la Presidencia, Luis Carlos Monge. El comunicado aclaró que Monge no fue quien calificó las preguntas de los periodistas como “mucha majadería”, y que la UCR debería rectificar esa acusación.
Asimismo, desde Zapote desmintieron que el presidente Chaves se negara a responder las preguntas de los periodistas o que los escoltas presidenciales intimidaran a los comunicadores. En el comunicado, se enfatizó que el mandatario mantiene total disposición a contestar preguntas tanto en las conferencias de prensa como en sus giras oficiales. También negaron cualquier alteración en la cantidad de escoltas presentes durante la conferencia del pasado miércoles.
Este intercambio entre ambas instituciones ha encendido el debate sobre el respeto a la libertad de prensa y las responsabilidades del gobierno en garantizar un espacio adecuado para los periodistas.